Por: Ricardo Argos.
La estrategia educativa de Andrés Manuel López Obrador suena más a un rescate de las televisoras que a una estrategia educativa a desarrollar en medio de la pandemia provocada por Covid 19.
Cuantas veces se ha escuchado al ahora presidente de México Andrés Manuel López Obrador hacer declaraciones en contra del rescate del gobierno a las empresas privadas, ha sido una de sus banderas tanto en sus múltiples discursos de campañas desde la cómoda oposición, hasta en la actualidad como jefe del poder ejecutivo de México.
Una y otra vez ha dicho que este gobierno es diferente, que no son igual que los anteriores, sin embargo, en mas de una ocasión ha demostrado en los hechos que la realidad de su gobierno es una muy distinta a lo que cada mañana recita ante los medios de comunicación.
Ejemplos son muchos y muy diversos, desde el discurso de sacar al ejercito de las calles, pasando por la realidad de los altos precios de las gasolinas y tarifas de energía eléctrica que no ha podido bajar, así como las cuestiones que tienen que ver con la realidad de los feminicidios y el rescate de las empresas privadas con dinero del pueblo de México que administra el gobierno de la república.
Pues resulta que la firma del “Acuerdo por la educación” entre el Gobierno de México con los concesionarios de las 4 televisoras que tienen mayor cobertura a nivel nacional, del pasado 3 de agosto, suena ni mas ni menos que a un rescate económico para las televisoras.
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Si, así como lo lee usted, efectivamente yo sé que no puede creerlo, pues no ha sido una ni dos veces en las que ha usted escuchado decir al ahora presidente algo en contra de la mafia del poder, la cual desde su punto de vista incluye a estas televisoras, sus recientes declaraciones contra Loret de Mola, Ciro Gómez Leyva un día si y otro también, harían creer a cualquiera, que mantiene firme su postura en contra de estas empresas que han dado cobijo y foro a este tipo de personajes.
No es secreto para nadie que las televisoras se encuentran en un proceso de transformación, lo anterior derivado de los altos contenidos ofrecidos en plataformas digitales, que ahora son mucho más atractivas para el espectador, por lo que las audiencias de las televisoras se han visto altamente afectadas y con ello, obviamente sus anunciantes disminuyen de la misma forma.
Se ha dicho que el mismo grupo Salinas ha tenido grandes pérdidas en el mercado norteamericano y se presume que motivado por esto es por lo que la Secretaría de Educación Pública contrató con Azteca una póliza millonaria para asegurar los bienes muebles de ésta, y con lo que grupo Salinas se ayudaría a recuperar de sus pérdidas millonarias.
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Volviendo al punto de la firma del “Acuerdo por la educación” podría ser uno de los rescates a las empresas privadas más importante a lo largo de todo este gobierno, no solamente por los 450 mdp que serán repartidos entre las 4 televisoras, supongo que no de forma proporcional, ya que me imagino que esto será de acuerdo con el número de canales que ponga a “disposición de la educación” cada una de ellas. Las cifras que presenta el gobierno de México justifican que el pago de esta cantidad dividida entre la cantidad de alumnos a los que se pretende llegar representa la módica cantidad de 15 pesos por alumno.
Sin embargo, esto no es lo único que les representa a estas empresas, ejemplo de ello es que al día siguiente de la firma las acciones de Televisa y Tv Azteca subieron, si a ello sumamos la imagen que buscarán ahora vender las televisoras, como empresas comprometidas con la educación de los niños, las niñas, los jóvenes y los adolescentes de todo México, lo cual generará sin duda una mejor imagen a todos sus anunciantes.
El rescate más allá de lo económico.
Con esto también se intentará recuperar la fortaleza de las televisoras, para que toda aquella audiencia que han venido perdiendo de una u otra forma los puedan recuperar, nunca será lo mismo ser un espectador de aquellos que son parte de la mafia del poder y que te “idiotizan” como se decía de Televisa o te “apendeja” como se decía de Tv Azteca, a volverse espectador de una televisora comprometida con la educación de México y que solo buscan transmitir calidad para los niños, niñas, jóvenes y adolescentes en nuestro país.
La estrategia de Salinas Pliego en poner a uno de sus más leales peones al frente de la Secretaría de Educación Pública, está rindiendo frutos y que mejor que en medio de una pandemia, donde los grandes empresarios saben que, de las peores crisis, se generan las mejores oportunidades de negocio.
¡Es cuanto!
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