La educación inclusiva en México debe garantizar el acceso, permanencia, participación y aprendizaje de todos los estudiantes, sin importar sus condiciones, físicas, emocionales, culturales, sociales o económicas, para ello se han implementado diversos programas y estrategias que permitan minimizar o eliminar aquellas Barreras para el Aprendizaje y la Participación (BAP) que provocan el rezago de los alumnos en condiciones vulnerables.
Por: Mtra. Yuvani Hernández Enríquez | @YuvaniHernández
Las BAP hacen referencia a todas las dificultades que experimenta cualquier alumna o alumno, surgen de la interacción entre los estudiantes y los contextos; las personas, las políticas, las instituciones, las culturas y las circunstancias sociales y económicas que afectan sus vidas y que los pueden colocar en desventaja en relación con el resto.
Frente al confinamiento por la pandemia por la COVID 19, los servicios educativos en México realizaron modificaciones para poder cumplir con su objetivo estableciendo así la Educación a distancia, modalidad que no es nueva, sin embargo, para la educación básica en el sector público representó un gran desafío.
Dar atención a las BAP en la educación a distancia, implica un gran compromiso, ante el panorama de desigualdad que se tiene en México, la Secretaria de Educación Pública en el 2012, estableció algunas de las BAP que se pueden encontrar en el sistema educativo pudiendo ser Actitudinales, Pedagógicas o de Organización, cabe señalar que estas barreras se multiplicaron al momento de ofrecer una educación en línea colocando en mayores desventajas a los alumnos y las familias que las enfrentan.
Dentro de las BAP podemos encontrar alumnos que se encuentren con algunas discapacidades físicas o intelectuales que los colocan en mayor desventaja frente a una educación igualitaria, que pocas veces los considera cuando hablamos de educación a distancia.
Atención a alumnos BAP en la educación a distancia, desafíos.
Los alumnos que se enfrentan a alguna BAP requieren de mayor apoyo e intervención al momento de dar una educación en línea, es necesario que los docentes realicen adecuaciones curriculares y al mismo tiempo trabajen con los docentes de USAER (Unidad de Servicios y Apoyo a la Educación Regular) para establecer los requerimientos esenciales de cada estudiante.
Para dar atención a alumnos BAP es necesario que las escuela tengan un registro claro de la situación de sus estudiantes, tener identificados a aquellos que se encuentran en esta situación y sobre todo reconocer cual es la barrera que los pone en desventaja, así mismo tener un vínculo estrecho y comunicación constante con los padres de familia quienes son pieza clave para el desarrollo emocional de los estudiantes, aunque los docentes diseñen estrategias se requiere del acompañamiento del padre de familia, y sobre todo del trabajo coordinado y estratégico de los docentes para que los alumnos con alguna se desarrollen de manera integral.
La educación a distancia con estudiantes BAP, ante la emergencia sanitaria ofreció nuevas formas y plataformas para enseñar, se buscó dar acceso a los estudiantes a través de la televisión o radio con el programa Aprende en Casa, se implementaron las clases en línea, se digitalizaron los libros de texto por mencionar algunas, sin embargo, es importante analizar ¿Qué tanto estas opciones permiten el acceso y la participación a los alumnos más vulnerables?
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El desafío de los docentes en la educación a distancia, ha sido buscar las estrategias de comunicación tanto con los alumnos como con los padres de familia, en algunas comunidades pequeñas del país se ha podido realizar la visita domiciliaria para dar a conocer las actividades, reforzar los aprendizajes y dar asesoría, pero la realidad es que en las grandes urbes donde los alumnos provienen de distintas colonias, y con grupos tan numerosos, ante la emergencia sanitaria resulta imposible tener acercamiento con todos los alumnos.
Disminuir o eliminar las barreras de aprendizaje y participación es tarea de todos, desde el diseño de estrategias, actividades, formas de comunicación y evaluación que establecen los docentes, como la participación y vinculación de los padres de familia para reforzar lo planteado, pero también requiere muy necesariamente el replanteamiento de la estrategia nacional para garantizar que se logre una educación inclusiva, de calidad y excelencia para todos.
Siendo los estudiantes tan diversos, la atención de alumnos con BAP en una educación a distancia necesita planes de acompañamiento individualizados y no planeaciones didácticas colectivas, centralizadas y poco flexibles que generalicen el proceso de enseñanza aprendizaje.
La Nueva Escuela Mexicana debe buscar una estrategia para dar educación a distancia a alumnos con alguna BAP que atienda criterios de diversidad, si bien se considera que la pandemia es temporal y que en algún momento se regresará a las aulas, no podemos alejarnos de que esta modalidad podría estar entre nosotros por mucho más tiempo, por ello la corresponsabilidad de todos los involucrados es fundamental para el desarrollo óptimo de los estudiantes, atendiendo así a la equidad educativa.
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